Que mejor que esta estupenda canción que viene que ni pintada para el verano, un tema en el que se mantiene viva esa fábula pop según la cual el verano es la época dorada, el sueño juvenil con el que reconfortarte incluso cuando los años pasen. The Drums se han ganado seriamente la opción a entrar en cualquier recopilación, con su pegadiza ‘Let’s Go Surfing’.

Summertime es el primer EP de una banda neoyorquina que predican la alegría de vivir pop. A veces, ensuciando las canciones del mismo modo que lo hacen los Crystal Stilts, sólo por la atmósfera. Otras, reduciéndolas a la mínima expresión, haciendo que sólo sirvan para sacar la sonrisa, como Vampire Weekend. También como Orange Juice, que siguen creciendo en influencia justo cuando parecía que ya nadie se iba a acordar nunca de ellos.

Un grupo así debe saber que puede quedarse bordeando el ridículo y The Drums no son tontos: de ahí que su canción más promocionada sea esa ‘Let’s Go Surfing’, con fantástica pausa para hacer palmas y un vídeo absolutamente risible, en el que no les da miedo ridiculizarse (¡esas pintas, esas maneras de hacer estiramientos!).

También vive en ellos el espíritu de los Smiths menos dramáticos, por lo que se suman al cada vez más numeroso carro de grupos que vuelve a citar a Morrissey y compañía, quizás la sombra más alargada de cuantas ha dado el pop en los últimos 30 años.

Dicen alguna de sus críticas que suenan a Joy Division haciendo un disco para fiesta playera. Puede parecer una boutade, pero también es una idea plenamente defendible. Canciones esqueléticas y fibrosas sobre el verano más triste, con estribillos de los que decir pegadizo es poco (’The Saddest Summer‘). Baladas que no lo son para escuchar cuando el sol se haya escondido y en la playa hay alguien metiéndose mano y no seas tú (’Down By The Water‘). Etc…

Fuente: Hipersonica