Hoy nos desplazamos a la playa de Antilles, en la localidad llanisca de Cué, una piscina natural en marea llena, con un entorno de excepción; sus castros o islotes, sus verdes prados y la sierra del Cuera a la espalda, ademas de las tonalidades de sus aguas las disfrutaron Lola y Jorge en una jornada inolvidable.