Aboño

La Coordinadora Ecoloxista de Asturias ha trasladado hoy su satisfacción ante la suspensión cautelar del desmonte del Alto Aboño previsto por la Autoridad Portuaria de Gijón como parte de la ampliación de El Musel y ha mostrado su esperanza de que éste sea el primer paso para que el proyecto pase a ser historia.
A raíz de que el Tribunal Supremo haya ordenado la suspensión de la modificación del Plan de Utilización de Espacios Portuarios (PUESP) de El Musel, el colectivo ecologista ha hecho público un comunicado en el que exige también que se pidan responsabilidades a quienes permitieron derribos de edificaciones en este monte situado en el concejo de Carreño, en el límite con Gijón.
La Coordinadora ha incidido en que la Autoridad Portuaria de Gijón pretende acometer el desmonte previsto en Aboño «con la complicidad del Principado» y que dio el primer paso con el derribo de viviendas y construcciones existentes en la zona pese a que no tenían licencias para hacerlo.
Esta resolución judicial, según esta organización, viene a demostrar que las obras de la ampliación del Musel «acumulan numerosas irregularidades en su tramitación» y que ha triunfado la persistencia de los vecinos de Carreño para evitar que se cometa «una tropelía ambiental más en el concejo, que ya acumula muchas».
La Coordinadora Ecoloxista ha recordado que de ejecutarse el desmonte habría un impacto considerable en las playas de Peña María y Xivares, y que cientos de familias de esta localidad verían perturbada su calidad de vida al desaparecer el monte que les aisla de la actividad industrial del valle de Aboño y por el impacto acústico durante las obras.